Visita el Rivas de hace 2500 años

Cuando los romanos llegaron a la Península Ibérica o se encontraron un vasto territorio sin habitar. En la Península había una serie de pueblos que ocupaban los diferentes zonas peninsulares. En el centro peninsular en los territorios que ocupan la Región de Madrid o territorios de las provincias de Toledo o Ciudad Real. Un pueblo que mantenía relaciones con vetones o celtíberos y que además, se instalaron en Rivas Vaciamadrid. Este noviembre nos acercamos al Hábitat Carpetano de Miralrío. Uno de los pocos visitables en la Comunidad de Madrid y que lo encontramos en Rivas. En el parque municipal de Miralrío en el Casco Antiguo. Fue en el año 1996, siglos y siglos después de que estuviera habitado, cuando fue descubierto el yacimiento carpetano de Miralrío. El asentamiento esta en una elevación del terreno. Es una posición estratégica en la que confluyen los ríos Jarama y Manzanares. Precisamente este era el elemento fundamental para que los antiguos ripenses se ubicaran en este territorio. La confluencia de los ríos daba una gran proximidad a los recursos naturales y facilitaba la agricultura y la ganadería. Los carpetanos acabaron integrándose entre los conquistadores romanos de una forma relativamente pragmática. Y es que luchas anteriores habían limitado sus posibilidades de resistencia ante el poderío militar de Roma. Los carpetanos vivían en aldeas, granjas pero también en auténticos núcleos urbanos. Lo que podemos considerar ciudades absolutamente. En muchas ocasiones dichos núcleos urbanos aparecen fortificados. Las ciudades se distribuían en calles paralelas de varios metros de anchura, además de plazas y zonas reservadas para el ganado. Las calles estaban empedradas y las viviendas eran cuadradas o rectangulares y se construían con zócalos de piedra sobre los que se levantaban paredes de adobe y constaban de vestíbulo, una estancia principal y una zona de almacén. Mientras se llevaban a cabo trabajos de urbanización de Rivas aparecieron los restos arqueológicos del Yacimiento de Miralrío. Los trabajos de excavación arqueológica permitieron documentar restos de un poblado ocupado durante la II Edad del Hierro y fechado entre los siglos IV y II a.c. El primer  documentado en el lugar corresponde a momentos avanzados de la Edad del Bronce. De este momento nos encontramos tres fosas excavadas en el suelo y que se interpretan como silos para alimentos. En las fosas hay contenidos orgánicos como fragmentos de cerámica. Aunque sin lugar a dudas los restos más notables son los de la vivienda carpetana. Una vivienda que estaba destinada no solo como uso doméstico, también para producción artesanal. Las cubiertas de los edificios se construían edificios a base de entramados vegetales que utilizaban como argamasa arcilla y tierra. En Miralrío se detectan evidencias de las labores desarrolladas en su interior tales como los hogares, las fosas empleadas como almacenes o soportales para estructuras relacionadas con la molienda, la cestería o el tejido. El conjunto se completa con un área de interpretación. Este fin de semana el centro Chico Mendes organiza una visita guiada por este enclave el sábado 26 de noviembre.  En la visita aprenderemos los usos del territorio y la modificación del paisaje de los primeros pobladores. La cita será entre las 11:30 y 12:30 de la mañana. Para inscribirse se realiza a través del Centro de Recursos Ambientales Chico Mendes. Si tienes cualquier duda o quieres ampliar información puedes ponerte en contacto conmigo, a través del espacio de consultas inmobiliarias, o me puedes localizar en BON LAR Asesores Inmobiliarios, especialistas en Rivas Vaciamadrid, en el teléfono: 91 666 11 00.