Bon Lar participamos y patrocinamos los dorsales la III Marcha contra el Cáncer

En esta edición conseguimos batir con creces el récord de participación con más de 2.000 corredores inscritos Todos cuantos conformamos Bon Lar nos sentimos muy orgullosos de haber colaborado al éxito de la III Carrera Popular Contra el Cáncer de Rivas, como venimos haciendo por tercer año consecutivo, con la participación y el entusiasmo de todo el equipo humano que conforma nuestro grupo inmobiliario. Gracias a nuestro equipo, más de 2.000 personas participaron el pasado domingo en el, posiblemente, el evento solidario más popular de cuantos se celebran en Rivas Vaciamadrid, la III Carrera Popular Contra el Cáncer. Una fantástica y luminosa mañana dedicada al deporte y la salud en familia en la que Bon Lar puso, por tercer año consecutivo, su granito de arena para conseguir que la III Marcha Contra el Cáncer constituyese todo un éxito de participación. El grupo inmobiliario Bon Lar patrocinó todos y cada uno de los dorsales de los participantes y nuestro equipo de personal participó, desde el primer momento, intensa y actívamente en la prueba. El evento, a beneficio de la Asociación Española contra el Cáncer (AECC) busca de esta manera recaudar fondos para seguir avanzando en la investigación y prestar las ayudas necesarias a los enfermos y familiares afectados por la enfermedad. La iniciativa ha contado con la colaboración del Ayuntamiento de Rivas-Vaciamadrid y de los seis clubes de atletismo de la localidad (Sons of Running, Running Rivas, Rivas 2.06, Ciudad de Rivas, Rivas En Marcha y Zancadas), además del patrocinio de varias empresas como Bon Lar. El objetivo de la carrera era que fuese una mañana muy familiar. Así, en el área de carrera hubo un servicio de ludoteca para el disfrute de los peques mientras sus padres corrían  y luego tuvieron su protagonismo en las carreras infantiles que se celebraron tras la llegada del último participante. Aunque se trata de un evento más recreativo que competitivo, se entregaron trofeos a los tres primeros corredores que alcanzaron la meta. El pódium de los chicos estuvo formado por los corredores, Paul Whitelman en primer lugar, Alberto Pastor en segundo y Rodrigo García, en tercera posición. En  las chicas, la primera posición ha sido para Victoria Pradilla, para Cristina Gómez el segundo lugar y Claudia Centurión como tercera clasificada. El itinerario, apto para todos los públicos, se pudo realizar andando o corriendo y tuvo su salida (a las 10.00 h.) y llegada en el recinto ferial Miguel Ríos, que se abandonó brevemente para transcurrir por la Avenida de Juan Carlos I. La organización comenta que tienen la ilusión de promover la mayor participación ciudadana en un evento solidario, uniendo a entidades, instituciones, socios, pacientes, familiares, voluntarios y a toda la sociedad civil, con un reto en cmún, y afirman que: “Correr por muchos motivos, pero sobre todo, por la esperanza de poder seguir avanzando en esta lucha y solidarizarnos con todas aquellas personas que cada día corren su propia carrera cuando se enfrentan a la enfermedad”. La AECC quiere agradecer a los patrocinadores, colaboradores y voluntarios su aportación antes y después de la carrera y, sobre todo, al Ayuntamiento de Rivas, que aportará toda la infraestructura en la logística  del evento.  Destacar la participación, como todos los años de Santiago Cuervo (Santi), quien micro en mano, dirigió y amenizó el evento desde el principio hasta el fin. Como otros años, se contó con la participación de la Legión 501, una tropa de aficionados a Star Wars que ambientaron el evento  disfrazados de soldados imperiales y otros personajes de la saga, y la batucada ZUMBALÉ de Carabanchel. Además, la prueba ha contado con la colaboración de todos los clubes de altetismo de Rivas como, Running Rivas, Songs of Runnings, Rivas 2.06, Zancadas y Rivas En Marcha, además de la colaboración del gimnasio Altafif, quien organizaba unas sesiones de calentamiento y la escuela de Vicky Cortés que organizó la sesión de Zumba. Una batucada animó con su jolgorio sonoro la mañana dominical y hubo otras sorpresas más como una carrera “cortita” para que los abuelos pudiesen correr con sus nietos demostrando el “lazo de unión” intergeneracional, que no puede ser de otro color nada más que verde para luchar contra el cáncer.